Mis sueños no están vacíos como mi conciencia parece estarlo.

Mis sueños no están vacíos como mi conciencia parece estarlo.
Tu fuiste el rayo que iluminó mi tormenta.

sábado, 3 de abril de 2010

El Sol y la Luna

-Madre ¿me contaras hoy la historia de amor entre la Luna y el Sol?
-Jaja... por supuesto hijo. Veras, era se una vez...


Desde hace muchos... muchísimos años que existe el día y la noche. Un día, el Sol vió a la Luna y se enamoró de ella...

-¿Y ella de él no? pobre Sol...
-Déjame seguir hijo.

... pero ella no lo vió a él. El Sol no dejaba de pensar en aquella hermosa Luna y un buen día la Luna cruzo su mirada con él y acabo perdidamente enamorada de él.
Los dos estaban tristes porque no podían estar juntos, no podían amarse... pero al cabo del tiempo, una noche... los se juntaron en aquel inmenso cielo azul y se demostraron una y otra vez lo mucho que se amaban.

-Hijo esto pasa cuando hay algún eclipse ^^.
-Vaya...

Desde el instante en el que el Sol y la Luna se juntaron, nacieron las estrellas que..

-¡¡Son hijos de ellos!! ¡no lo sabía mami!
-En efecto, todas las estrellas que hay en el firmamento son los hijos e hijas del Sol y la Luna.
-Que bonito mami.
-Me alegro que te haya gustado. Ahora cuando mires el cielo, acuerdate de esta historia y sin darte cuenta, sonreiras.































Srta. Crysta

No hay comentarios:

Publicar un comentario